Actualmente, las regulaciones no paran de crecer y los riesgos digitales son cada vez más sofisticados. Ya no alcanza con "cumplir" o testear por separado: la verdadera fortaleza de una estrategia de ciberseguridad reside en su capacidad para anticiparse, adaptarse y responder de forma integrada. Hoy, la verdadera fortaleza de una estrategia de ciberseguridad reside en su capacidad para anticiparse, adaptarse y responder. Por eso, la sinergia entre pentesting y compliance se vuelve un pilar esencial para las grandes organizaciones.
Desde Strike y Brotek, sabemos que proteger los sistemas e infraestructura no es solo encontrar vulnerabilidades. Se trata de transformar cada hallazgo en decisiones concretas que sumen valor y que, además, aceleren el cumplimiento de los marcos regulatorios más exigentes del mercado.
El pentesting manual, realizado por expertos, permite ir más allá de los escaneos automáticos tradicionales. Mediante técnicas de explotación controlada y modelado de amenazas, los pentesters evalúan cómo un atacante real podría comprometer la infraestructura, acceder a datos sensibles o escalar privilegios. Esta profundidad no solo permite detectar vulnerabilidades técnicas, sino también fallos en la lógica de negocio, errores en configuraciones de nube o endpoints desprotegidos que escapan al radar de herramientas automatizadas.
Cuando se realiza de forma continua y bajo una metodología sólida, el pentesting se convierte en un motor de mejora constante. Permite medir la efectividad de los controles de seguridad ya implementados, validar si las remediaciones anteriores fueron exitosas, y ajustar la estrategia de defensa en función del contexto actual de amenazas. Además, al entregar reportes con evidencias reproducibles y clasificaciones de riesgo alineadas con CVSS, MITRE ATT&CK u otros marcos reconocidos, se facilita la toma de decisiones dentro del equipo de seguridad y se optimiza la colaboración con otras áreas técnicas y de negocio.
La integración entre pentesting y compliance no es automática, pero es absolutamente posible cuando existe un puente claro entre lo técnico y lo normativo. Cada hallazgo del pentest —desde una mala configuración en una política IAM hasta una vulnerabilidad crítica en una aplicación web— puede mapearse contra requerimientos específicos de marcos como:
Este proceso de mapeo requiere un conocimiento profundo tanto del entorno técnico evaluado como de los requisitos del marco regulatorio en cuestión. En este punto, contar con aliados especializados en IT Security Compliance se vuelve clave para traducir los resultados del pentest en documentación útil para procesos de auditoría, generar matrices de control actualizadas y transformar debilidades técnicas en planes de acción concretos, alineados con políticas de cumplimiento y de seguridad de la empresa.
Este enfoque no solo mejora el cumplimiento: lo hace más eficiente. En lugar de generar esfuerzos paralelos, permite que cada inversión en seguridad técnica tenga un retorno doble:
La colaboración entre Strike y Brotek responde a una necesidad real del mercado: integrar tecnología de punta con el conocimiento experto en compliance. Mientras que la plataforma de pentesting de Strike permite pruebas manuales avanzadas, reportes interactivos y seguimiento de vulnerabilidades en tiempo real, Brotek aporta la experiencia necesaria para vincular esos hallazgos con procesos de gobierno, riesgo y cumplimiento.
Juntas, ambas compañías habilitan una nueva forma de abordar el cumplimiento: más integral, más estratégica y con foco en resultados reales.
Strike y Brotek comparten una misma visión: ayudar a las organizaciones a fortalecer su postura de seguridad mientras cumplen con los estándares regulatorios más exigentes. Esta colaboración busca acercar soluciones de pentesting avanzadas a empresas que también enfrentan desafíos en materia de compliance, integrando ambas perspectivas en una propuesta más robusta.
Siempre daremos prioridad a la obtención de valor de cada resultado.